Acá va un pequeño extracto de “el secreto del niño”. Pero, primero, un poco de contexto !
El hombre está visitando a su amigo de toda la vida, el “Gordo”, en su taller mecánico. El taller no es exactamente un lugar de trabajo ejemplar. Encontramos al mecánico, sentado en su habitual taburete, en medio del desastre :
Sentado en un viejo taburete, su inmensa sombra rondaba sobre una corte heteróclita de carcasas de autos, autos a medio pintar, autos sin motor o sin puertas. En fin, cualquier cosa relacionada con autos. Esa nobleza de metal ocupaba todos los rincones de su palacio y estaba dispuesta a dejar la vida por su adiposo rey. Y, de hecho, la gran mayoría ya lo había hecho.
El hombre se preguntó cómo su amigo había logrado tener un negocio tan exitoso en tales condiciones. Se veían mesas rodantes por todos lados, hundiéndose debajo de montañas de herramientas. En las cuatro esquinas, se encontraban torres de llantas, que lograban mantener su precario equilibrio únicamente gracias a la ayuda desinteresada de un ejército de escobas, de ejes torcidos y de un perchero oxidado. Desorden y suciedad libraban una guerra sin cuartel tras bambalinas, sin que el gigante monarca pareciera percatarse de ella, o por lo menos, sin que pareciera importarle excesivamente.
Qué te pareció ?